El objetivo de nuestro trabajo es emitir una opinión técnica profesional sobre si las cuentas expresan en todos los aspectos significativos, la imagen fiel del patrimonio y de la situación financiera de la Sociedad y de los recursos obtenidos y aplicados durante el ejercicio y contienen la información necesaria y suficiente para su interpretación y comprensión adecuada, de conformidad con principios y normas contables generalmente aceptados.
La importancia y responsabilidad que supone este objetivo se hace patente cuando se considera que la información económica que las empresas elaboran de manera periódica puede ser utilizada en la toma de decisiones por diferentes colectivos (inversores, accionistas, entidades de crédito, etc.) y que dicha información debe estar exenta de errores significativos que puedan conducir a conclusiones erróneas.
Así hay sociedades que, de manera voluntaria, deciden someter sus cuentas anuales a la revisión por parte de un auditor externo con la finalidad de asegurar frente a terceros su fiabilidad y transparencia.
En otras ocasiones, la Ley determina la obligación de auditar sus cuentas anuales cuando las sociedades cumplen determinados supuestos, por encontrarse en alguna situación determinada o por haber sido solicitado por una persona autorizada al respecto.
La circunstancia más común que obliga a una entidad a someter sus cuentas anuales a auditoría es que cumplen al cierre de dos ejercicios consecutivos al menos dos de los siguientes requisitos:
- Total partidas de activo > 2.850.000€
- Importe neto de la cifra de negocios > 5.700.000€
- Personal medio durante el ejercicio > 50 trabajadores
TAC y su red dispone de personal con gran experiencia en la auditoría de cuentas anuales, tanto individuales como consolidadas, de entidades de diferentes sectores de actividad (industrial, servicios y financiero) así como de entidades no lucrativas (fundaciones, asociaciones, etc.).
Desde TAC entendemos la auditoría, más allá de los requisitos legales, como una oportunidad de mejora, por este motivo nuestra metodología no se limita a la realización de procedimientos y emisión de un informe en base a los estándares legalmente establecidos, sino que, además, procuramos orientar nuestro trabajo a la detección de riesgos potenciales y áreas de mejora, aportando un valor añadido al trabajo.